Reseña “Los gallinazos sin pluma” de Julio Ramón Ribeyro

 

Mi reseña de un gran cuento

 

    El cuento nos posiciona en un lugar y tiempo determinado, donde el autor, desde su imaginario, crea una atmosfera viva del escenario. Las representaciones de algunos personajes, aunque secundarios, adquieren importancia, pues explican la idiosincrasia del ambiente de la historia tras una descripción detallada. El sujeto lírico presenta a los actantes principales que integrarán el cuento, de la siguiente manera: “- ¡a levantarse! ¡Efraín, Enrique! ¡Ya es hora! ”. La narración no es extensa, sin embargo, con lenguaje sencillo, Ribeyro describe a la perfección el ambiente del cuento, así como los personajes que lo integran. Asimismo, les aporta su personalidad característica, de manera tal, que, como lectores, en ocasiones nos atrapan ciertos sucesos, ya sea odiando a Don Santos o esperando que Efraín y Enrique logren un mejor futuro.

Independientemente que encontremos uso de lenguaje vulgar, fue necesario su empleo para retratar la pobreza en que vivirían los personajes. resulta evidente la similitud de los gallinazos con los hermanos, pues mostró su deterioro como individuos al compararlos con unos animales carroñeros.

Considero que fue una lectura muy atrayente. Solo quedé esperando por más, con gran curiosidad por saber qué sucedió con Efraín y Enrique y cómo acabó Pascual.